Ferro Carril 5 – Polancos 1: los de campaña tuvieron un paseo por la franja

El gran Ferro Carril derrotó a Polancos de Nueva Palmira de forma categórica y vuelve a estar entre los cuatro mejores del fútbol del interior del país. Ahora será un mano a mano con el Club Atlético Central de San José, que tiene 30 títulos locales (seguido por Río Negro con 17) y no ha logrado levantar la orejona aún.

Media hora bastó para lograr 3 goles y marcar el rumbo del encuentro, aunque finalmente terminamos venciendo por 5 goles a 1. Fue la segunda derrota de Polancos en este 2011, que al parecer pierde pocas veces, pero cuando cae derrotado lo hace por gran diferencia de goles.

Fue de las mejores producciones futbolísticas del año, con Marcio Backes rayando a gran altura, al igual que Matías Suárez (un todo-terreno titular indiscutido en este Ferro actual) así como del “Juanchi” Iriarte, que cuando la mueve, Ferro Carril es otro.

El hincha de la franja se merecía un triunfo así. Esperábamos casi con ansiedad volver a deleitarnos con este estilo de juego que es característico de nuestro elenco, mostrando una superioridad notoria de principio a fin en todas las líneas.

Era el espectáculo perfecto pero sucedió lo lamentable que empañó todo lo bueno, toda la alegría; cuando faltaban escasos ocho minutos para el final del encuentro sucede lo que entristeció y consternó a todos los ferrocarrileros; en un cierre sobre el lateral de la tribuna Irazoqui cerca del medio del campo Rodrigo Robaina llegó primero a la pelota, el terreno estaba fangoso, el pasto alto y por debajo del mismo mucha agua acumulada, lo que conspiró para que no pudiera afirmarse como seguramente el pensó; su zapato quedó literalmente clavado entre ese lodo y su pierna estirada restando toda posibilidad de movimiento cuando DANIEL BERRUTI VECO (casaca número 7) le aplica un terrible “planchazo” y le provoca lastimosamente triple fractura de tibia y peroné que lo tendrán alejado por algún tiempo de los escenarios de juego.

NO FUE CASUAL, SE LA PROVOCAN EN FORMA ALEVOSA. El señor Berruti dejó el pie con premeditación a un deportista de mil batallas con tantas camisas sobre su pecho, por lo que durante este tiempo lo pudimos conocer por su actuar y proceder dentro y fuera del campo le deseamos pronta mejoría y como siempre lo ha hecho a tener muy en alto el ánimo y alimentando en todo momento un pronto retorno a nuestro elenco en plenitud de sus condiciones técnicas y sobre toda humana. El señor Berruti se equivocó y así lo demostraron sus compañeros de equipo y su propia hinchada.

Ferro Carril no provocó al rival pese a ir goleando, no “mostró” la pelota en forma desleal para humillar, se dedicó a jugar y buscar más goles, en buena ley. Por eso entendemos que el rival no debió recurrir al golpe y en ese sentido estuvo mal (las cuatro expulsiones son prueba de ello). No debiera esperarse menos que una nota de solidaridad con nuestro jugador por parte de la directiva de Polancos.

Al mismo tiempo reconocemos que estuvo bien la actitud de los jugadores de Polancos en asistir al lesionado y empujar junto a los nuestros la ambulancia cuando se quedó estancada en el barro. De las imágenes más emocionantes del encuentro.  También debe reconocerse el buen gesto de fingir una lesión luego de retirado Robaina del campo de juego, quedando con inferioridad numérica y haciendo así que culminara el encuentro.

El Partido

Haremos una breve reseña del encuentro dado que nuestro estado de emocional como ferrocarrilero a pesar de estar satisfecho por todo lo visto nos embarga un sabor amargo por lo sucedido.

El comienzo fue a toda máquina con un Ferro arrasador, aplastante según comentan otros medios de prensa locales, superando por todos los sectores al rival de turno, quitando y jugando, abriendo la cancha, realizando desbordes y dejando a Diego Burgos como un mero espectador.

Tanto va el cántaro… Y a escasos cinco minutos del inicio del partido llegó la primera conquista por medio del “Juanchi” Iriarte, quien en forma inteligente hace un envío en comba desde el sector este sobre el arco sur para sorprender al corpulento arquero que no puedo restarla y terminó introduciendo el balón en propia meta.

Pocos minutos después llega el turno para el todo-terreno Matías Suárez, que juega de volante de contención, volante ofensivo, defensa con marca y proyección, y hasta te hace goles. Marcio Backes ejecutó un tiro libre potente, rastrero, de derecha a izquierda y Matías lo intercepta confundiendo a toda la defensa rival, para definir fuerte y abajo, a la derecha del golero que se jugó a su izquierda en el mano a mano.

Sobre los 30 minutos llegaría el tercero, esta vez como recompensa al gran partido que estaba realizando Marcio Backes. Vino un centro de izquierda a derecha, el balón salió restado hacia talud sur de la Tribuna España y Marcio Backes conecta un remate violento, rastrero, que literalmente fusiló al guardameta rival.

Era el 3 a 0, justo, merecido, fiel reflejo de un dominio absoluto de los dirigidos por el gran Ramón Rivas que hizo 3 variantes que resultaron en grandes dividendos para una máquina de 1912 que cada día rueda mejor. Los ingresos de Marcio como volante por derecha, de Sebastián Silveira junto a Josema y Matías como lateral, sin duda son obra de un estratega que cuando prepara un partido lo hace como si fuese un partido de ajedrez.

Es que Marcio y Matías marcaron, jugaron e hicieron su gol, mientras Sebastián demostró calidad pura, de quite y pases de jerarquía, repitiendo aquellos partidos del 2009 cuando fuimos campeones del interior, algo que pocos equipos del interior pueden ser.

Se fue el primer tempo con un 3 a 0 claro, inexpugnable, categórico. En el inicio del complemento ingresaron Fabricio Lairihoy y Sergio Cruz por Jorge Álvez y Sebastián Silveira.

El encuentro empezó con un Ferro Carril tímido, a media máquina, lo que derivó en el descuento del visitante, con soberbio disparo de media distancia que frustró toda posibilidad de reacción a Burgos. Virtud del rival.

Esto sacudió a nuestros jugadores y retomamos el dominio del balón y del trámite, consiguiendo dos goles más gracias al “cuervito” Lairihoy.

El cuarto gol de Ferro Carril vino por una jugada por el sector derecho del ataque, con un centro cruzado y cabezazo al gol del “cuervito”, mientras el quinto resultó de una pelota luchada y ganada por el “mago” Carlos Vera, que la luchó ante Nicolás Rotundo (ex Peñarol de Montevideo) y frente al golero cedió al centro del área para Lairihoy quien sólo tuvo que acariciarla de cara interna al fondo del arco.

Antes del final no me quiero olvidar de marcar la entrega de Carlos Vera, buscando y queriendo todo el partido, colocando muy buenos pases y que aunque no tuvo el suyo realizó un gran partido. Asimismo, el “mono” Nicolás Ferreira no tuvo liga, las buscó, corrió, marcó, le sacaron una de la línea de meta y le anularon un gol por fuera de juego. Estuvo cerca de convertir y seguramente lo logre en semi finales, donde más lo precisamos.Sergio “lobito” Cruz le pega con un caño señores, ya lo demostró en lo local y ayer estrelló un remate en la base del parante izquierdo del arco norte que todavía se está moviendo. Debió ser gol y festejo, pero quizás hacerle 6 goles a un equipo que casi nunca pierde era demasiado.

Fue triunfo señores, fue un paseo por la franja y somos uno de los cuatro.

Las Fotos

A continuación les dejamos una galería de imágenes el encuentro.

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